Prueba Helicobacter para Análisis clínicos
El Helicobacter Pylori es una bacteria que afecta al aparato digestivo. Puede ser una bacteria totalmente asintomática, pero también puede causar otras enfermedades como la gastritis, úlceras o cáncer de estómago. Los principales síntomas de la existencia de un problema digestivo son el dolor abdominal, la distensión abdominal, náuseas o vómitos, diarreas o pérdida de apetito y, por lo tanto, también bajada de peso. Cuando aparecen estos síntomas puede ser que se necesite hacer una prueba para saber si lo que está causando estos problemas es la bacteria H. pylori.
La prueba para detectar la bacteria se puede hacer mediante un análisis de sangre, una prueba de aliento, un análisis de heces o una endoscopia. En este caso, la prueba se usa para detectar la presencia de Helicobacter pylori en el aparato digestivo, ver si los síntomas digestivos son causados por una infección por la bacteria y averiguar si el tratamiento que se esté aplicando estaría dando resultados.
Con el análisis de sangre se pretende detectar la presencia de anticuerpos que combaten contra la bacteria. Lo único que se necesita es tomar una muestra de sangre al paciente. La prueba de aliento se realiza mediante la toma de una muestra de aliento respirando en una bolsa recolectora y luego se realiza el mismo proceso, pero con la ingesta de un material radioactivo inofensivo, hecho que permite comparar las dos muestras y ver si la segunda muestra contiene niveles altos de dióxido de carbono, signo de infección por H. pylori. En cuanto a la prueba de las heces, normalmente, se efectúa mediante la toma de una muestra de las heces del paciente y haciendo un posterior cultivo para detectar la presencia de la bacteria. Finalmente, si las otras pruebas no han dado suficiente información para dar un diagnóstico claro, se realiza una endoscopia. La endoscopia permite que el médico pueda examinar bien el esófago, el revestimiento del estómago y el intestino delgado y se pueda tomar una biopsia, es decir, una pequeña muestra de tejido para que sea analizada.
¿Qué es la prueba de Helicobacter Pylori?
Las pruebas para detectar esta bacteria pueden realizarse mediante un análisis de sangre, de heces o de aliento.
¿En qué consiste la prueba de H. Pylori?
- Prueba de aliento: detecta una infección evaluando la cantidad de determinadas sustancias en el aliento. La persona debe respirar en una bolsa, luego se administra líquido o una pastilla y se vuelve a prestar una muestra de aliento. Posteriormente, el especialista comparará ambas muestras para evaluar la cantidad de dióxido de carbono, que podría indicar una infección.
- Prueba en las heces o cultivo de heces: este examen busca los antígenos que existen en las heces. En general, se deberá recoger una muestra de heces en un recipiente especial, sellarlo y etiquetar el recipiente.
Existen algunos casos en los que estas pruebas no resultan en un diagnóstico certero, por lo que el profesional podría pedir que se realice una endoscopia.
¿Por qué se realiza?
Cuando existe la sospecha de una infección por la bacteria H. Pylori se suele indicar este tipo de pruebas. En general, se hace ante la presencia de síntomas como dolor abdominal, distensión abdominal, náuseas, diarrea y vómitos.
Preparación y procedimiento de la prueba de Helicobacter Pylori
Estos estudios no tienen ningún tipo de riesgos. En el análisis de sangre puede que se sienta un dolor leve o molestia en la zona donde se ha ingresado la aguja, pero la mayoría de estos síntomas desaparecerá al cabo de unas horas.
Significado de los resultados
Por el contrario, si los resultados son positivos, significa que el paciente presenta la infección causada por H. Pylori. A partir del diagnóstico, el profesional puede administrar antibióticos para tratar la patología y los síntomas.