¿Por qué se realiza?
La colocación de prótesis removibles se recomienda en casos de ausencia de piezas dentales para permitir al paciente recuperar la función masticatoria y estética.
También se recomiendan en casos en que no puedan aplicarse prótesis fijas, por rechazo del hueso a los implantes dentales u otras estructuras fijas, o por otros motivos de salud.
Asimismo, también suponen un menor coste económico, motivo por el que muchas personas recurren a esta alternativa.
¿En qué consiste?
El tratamiento consiste en la colocación en la boca del paciente de aparatos o piezas dentales de quita y pon. Para asegurar la máxima efectividad y comodidad cuando el paciente la empiece a llevar, se lleva a cabo un estudio previo del conjunto de la boca y condiciones personales del paciente. Así, se fabricarán unos dispositivos lo más similares posible a los dientes del paciente en cuanto a tamaño, color y forma. Para ello se llevarán a cabo diversas pruebas, previamente al día de la colocación.
Preparación para la prótesis removible
Previamente a la colocación de la prótesis removible y a la restauración de la dentadura del paciente se llevarán a cabo cuatro fases:
- Examen de las condiciones y necesidades personales del paciente. En este proceso se deciden también los tratamientos preliminares antes de diseñar la prótesis: extracción de piezas afectadas, corrección del hueso mandibular, etc. El objetivo es preparar la cavidad oral para la colocación posterior de la prótesis.
- Diseño de la prótesis, en función a su posición, la mordida de los maxilares, la funcionalidad de la masticación y movimientos durante el habla.
- Implantación de la prótesis
- Tratamiento y seguimiento
Cuidados tras la intervención
Las prótesis removibles no son únicamente dispositivos, sino que transmiten fuerzas en los dientes, las encías y los huesos, de ahí que requieran especiales cuidados de adaptación, cosa que varía según la persona y según el tipo de prótesis.
Aunque el paciente se terminará acostumbrando a llevar la prótesis e incluso se olvidará de que la lleva, es necesario tener paciencia al principio, acudiendo a consulta para adaptar y corregir todo aquello que le incomode.
Es importante destacar que, al inicio, el paciente:
- Notará una sensación extraña que irá desapareciendo.
- Producirá más saliva de lo normal, que se irá normalizando, también.
- Notará menos percepción del gusto, que se recuperará con el tiempo.
- Puede vocalizar y pronunciar peor, por el espacio que ocupa la prótesis. Se recomienda leer en voz alta o hablar frente al espejo, para practicar.
- Puede morderse las mejillas y la lengua fácilmente.
- Notará opresión o dolor en los dientes y las encías, sobre todo al morder alimentos y al cerrar la boca, cosa que desaparecerá con el tiempo.
Por otra parte, mantener una atención adecuada de la dentadura influirá en su durabilidad y en la salud bucal. Por lo tanto, se recomienda:
- Cepillar la dentadura postiza diariamente. También la lengua y las encías.
- Cuando no se está utilizando la prótesis dental se debe mantener en una solución para prótesis y agua, para evitar que pueda deformarse.
- Se debe utilizar con cuidado.
- Si se afloja, se rompe o se agrieta, debe consultar con el especialista en Odontología y Estomatología.
Alternativas a este tratamiento
Hoy en día existen tratamientos que pueden sustituir los dientes perdidos y no necesariamente tiene que ser mediantes prótesis removibles. Algunos de ellos son:
- Implantes dentales: pueden ser de dos tipos, el titanio y el zirconio. Las ventajas de los implantes de titanio es que son fácilmente manipulables y son bastante duros. Además, tienen una gran compatibilidad con el organismo. Respecto al zirconio, es un material muy duro y resistente. Además es de color blanco, lo que simula los dientes originales. Es esencial mantener una correcta higiene dental para extender su duración.
- Técnica all on four en la que se colocan coronas de cerámica cuando existe una pérdida de hueso moderada y las prótesis no se sujetan.
- Implantes cigomáticos que se utilizan cuando el hueso ha desaparecido casi por completo. En este caso, se utilizan implantes más largos y se colocan en el hueso cigomático. Además, permite al paciente disfrutarlos de forma inmediata.